David era un niño que vivía en Torre Gorda, en España, con sus padres. Cuando tenía ocho años, sus padres deciden irse a Cuba para buscar mejores trabajos y una mejor situación económica, dejando a David en España con sus tíos.
Éstos obligaban a David a trabajar mucho, y además lo maltrataban. Pero un día los tíos reciben noticias de los padres de David y le dicen que han conseguido buenos trabajos y se habían adaptado muy bien a Cuba (cuando la verdad era que habían muerto los dos), por lo que querían que David se fuera con ellos.
Los tíos de David lo embarcaron hacia Cuba en un barco llamado "Buenaventura", que estaba dirigido por el capitán Salcedo. Lo único que pretendían los tíos era que David muriera en el viaje (asesinado por el capitán, al que habían pagado para ello) para quedarse con la herencia.
Durante el transcurso del viaje, David conoce a un tripulante del Buenaventura que era muy amable con él y que se llamaba Bartolomé. El resto de la tripulación, en cambio, incluido el capitán Salcedo, no le manifestaban mucha simpatía.
El capitán Salcedo deja abandonado a David en un barco lleno de muertos para que muera en él. Sin embargo, tras una gran tempestad, aparece en una mansión donde conoce a Adolfo y a su hermana doña Rosa, y a partir de aquí la historia da un giro importante, pero no voy a seguir contando, porque no tendría sentido. Si queréis saber cómo acaba la historia y si David descubre la muerte de sus padres, no dudéis en leeros el libro.
En mi opinión, es un libro interesante y entretenido, que no te deja indiferente. No es muy largo, y además es fácil de leer, por lo que no supone un gran esfuerzo. Además tiene un vocabulario que no es difícil de entender y la historia no se centra en un sitio, sino que transcurre en varios lugares.
Es adecuado para gente de 12 años en adelante. Os lo recomiendo. Ah, por cierto, el autor es José María Latorre.
Samuel Gómez Navarro. 4º B.
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